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lunes, 19 de enero de 2009

Vinitos

En estos días tomé algunos vinos de Campo Negro, uno de Grapes y Olives (!) y otro de Terrazas de Los Andes. Lamentablemente nada bueno bajo el sol...

De Campo Negro tomé el Reserva (CS-Ma) de Exportación y los Bonarda y Malbec de Finca El Reposo (2º marca). Estaban sin etiquetar, así es que no sé la añada ni alcohol. Son de Cruz de Piedra, Maipú.
Los FER Bonarda o Malbec salen $ 25 y los Reserva $ 55 -acá se venden solo los Varietales Cabernet Sauvignon y Malbec.
El Bonarda se presentó en vista fiel representante del Varietal, con una profundidad media-alta. El Malbec también, salvo que mostraba una profundidad muy alta. El Corte muy similar al Malbec en vista. El problema para los tres vendría en nariz y se potenciaría en boca: nada de nada. Vinos planos sin descriptores sobresalientes. Vale aclarar que sin defectos -aunque claro, también sin virtudes-.
EL Bonarda fue el más flojo, pues el Malbec mostraba muy buenas sensaciones táctiles en boca. Lo mismo que el CS-Ma de Campo Negro. Se sentía buen alcohol, volumen y persistencia, pero no había fruta, sensación vegetal o mineral alguna.
Un vinotequero amigo, me había mencionado que después de probarlos no los incorporó porque no le sumaban nada: el único interesante fue el Saint Jeanet -Varietal Blanco-. Pero que no iba a incorporar una bodega que tiene media docena de etiquetas por una sola.
Y ciertamente coincido en la apreciación: los Finca El Reposo Bonarda y Malbec, y el Campo Negro Reserva (Corte) son vinos intrascendentes -me queda pendiente probar ese Saint Jeanet-.

De Grapes y Olives -así se llama el emprendimiento lamentablemente-, tomé un Watungasta Apartado Malbec 2005 que tenía guardado hace un par de años. $ 60, 13,8% Alc., 4.500 botellas de este vino de Tinogasta, Catamarca.
Lo guardé el último año y medio, más por miedo que por otra cosa, debido a la frustración que le había provocado a un par de amigos que también se habían hecho de botellas y lo había descorchado ya.
El vino estaba enterito, nada evolucionado. Bien en vista y zafaba en nariz. Pero en boca se mostraba con una acidez nada agradable y falto de la dulzura propia de la cepa. Además, tenía aguja al maridarlo con alimentos que no deberían dar ese efecto. Al otro día -siempre en heladera y con vacum- estaba caído en las pocas cosas buenas y había potenciado las malas: fue duro terminarlo.
El problema básico de este Watungasta es el precio (carísimo): es una etiqueta que hasta $ 20 es entendible que se cobre. He probado en su momento -porque no sé si la bodega sigue produciendo como tal- algunos vinos y me gustaron. El tema es, que los que compré sin probar resultaron un fiasco.

El último de la serie fue un Terrazas Reserva Malbec 2006. $ 49 y 13,8% Alc.. WS 89 (Nov 15, 2008 $17. Drink now through 2010).
Ya había tomado otra botella hace seis meses y creí tener mala suerte. Pero no. Es mediocre.
Caro para lo que cuesta. Flojo, comparado con otras añadas que he tomado (2004 por ejemplo).
En vista es impresionante con sus tonos purpúreos negruzcos y con una profundidad altísima.
En nariz no está mal, pero lo más flojo fue en boca. Se huele fruta negra y roja (mediana y chica, como ciruelas, cerezas y frutillas) pero extremadamente sutil. También algo de caramelo y sensaciones vainillosas, pero extremadamente suaves.
Ahora, en boca, es dificilísimo sentir la fruta y esas sensaciones derivadas de la madera. Y también está falto del dulzor del Malbec, además de no tener un buen cuerpo, ni ser ni algo untuoso y mostrar una peristencia corta.
En fin, una añada regular. Que a lo sumo llega a los 84 puntos (siendo optimista).
Lo que no entiendo son los WS 89 que logró... ¿Pondrá mucha publicidad la bodega en Wine Spectator?

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