Nos enteramos por Argentine Wines que los Sauvignon Blanc chilenos están pisando muy fuerte en el mundo.
En El Mercurio de Chile, Eduardo Moraga Vásquez sacó una nota al respecto, donde cuenta la historia, el presente y las tendencias de la cepa en Chile.
Abre la nota con tres conceptos encadenados: hace una década los sauvignon blanc de Chile eran olvidables. Hoy amenazan a los líderes del mundo. Las próximas jugadas son expresar la diversidad geográfica del país y lograr vinos más complejos.
El Sauvignon Blanc está de moda en los pubs ingleses y gana terreno entre los consumidores, especialmente entre las mujeres.
La oferta mundial de SB de calidad, hasta hace poco tiempo, era de precios relativamente altos, como los provenientes de Nueva Zelanda. Hasta prohibitivos, como los de Sancerre, Francia.
Pero las viñas chilenas dieron un salto en calidad y comenzaron a pisar fuerte. Esto sumado a los precios muchísimo más baratos de los SB chilenos y la crisis que arrancó hace más de un año, cambió las reglas de juego del mercado mundial. Y Chile ya está muy presente con sus Sauvignon Blanc.
Jancis Robinson, la crítica de vinos más reputada del Reino Unido, dijo hace poco que Chile se ha consolidado como un proveedor de buena calidad en tintos. Sin embargo, una de sus características más distintivas es el amplio rango de buenos y crecientemente sutiles Sauvignon Blanc.
Y los números de 2009 lo corroboran: 16,2 millones de litros (contra los 14,4 millones del Cabernet Sauvignon, otrora caballito de batalla chileno).
El salto de calidad
Francisco Baettig, enólogo de Viña Errázuriz, dice que a comienzos de esta década, la calidad lograda por las viñas de Nueva Zelanda mostraba una brecha enorme, casi insalvable, con la realidad chilena.
Históricamente, en Chile el SB se confundió con la Sauvignon Vert o Sauvignonas (más herbácea y fenólica, de sensación menos compleja y aromática). Y esto se acentuaba por estar plantado en zonas cálidas de los valles centrales.
La renovación de variedades se produjo con el auge de los valles costeros en la última década. Las vitivinícolas chilenas comenzaron a migrar a esos lugares más fríos como forma de hacer vinos blancos más frescos. Como en Casablanca y Leyda, los dos valles costeros líderes, casi no existía tradición vitivínicola, fue natural para las bodegas romper con la inercia y plantar clones especialmente seleccionados de SB.
La ecuación de mejores clones y clima marino fresco comenzó a dar resultados sorprendentes en cuanto a calidad. Como un círculo virtuoso, eso hizo que las bodegas chilenas subieran su apuesta e implantaran más Sauvignon Blanc. De 6.790 Has. en el 2000 se pasó a 8.862 Has. en 2007.
Otro flanco fue el agronómico, cuidando los racimos del exceso de sol y el estar más pendiente de la fecha correcta de cosecha. Mariluz Marín, dueña de viña Casa Marín, dice que la ventana de tiempo es mucho más estrecha. En sólo dos días puedes pasar de tener una todavía verde a una madura y, en ese mismo tiempo, a tener sobremadurez.
Y el tercero la vinificación: los enólogos aprendieron a evitar la presencia de aire en el proceso de elaboración, preservando aromas frescos y evitando la oxidación, el gran enemigo del SB.
Reconocimiento y opiniones sobre el futuro
El Sauvignon Blanc chileno comenzó a ser noticia entre los consumidores y críticos de vino.
Por ejemplo, en la última premiación anual de la prestigiosa revista británica Decanter, distinguió como trophy (lo mejor del Varietal) al Castillo de Molina Sauvignon Blanc Elqui 2008 y al Undurraga TH Sauvignon Blanc Lo Abarca 2008.
Pero el salto en calidad no ha ido aparejado de un crecimiento significativo en los precios.
Mariluz Marín, de Casa Marín, dice que todavía nos falta posicionarnos en cuanto a imagen. Los neozelandeses lo hicieron muy bien: ejecutaron una campaña de imagen país y se posicionaron en segmentos de precios altos. En cambio, cada viña chilena trata de posicionarse en forma solitaria. Hay que tener en cuenta que en los supermercados o tiendas nos colocan dentro de las góndolas de Sudamérica, región que tiene fama por los vinos tintos. Ese posicionamiento hace que la gente no esté dispuesta a pagar mucho por un vino blanco.
Sin embargo, respecto de la posibilidad de subir los precios por botella no hay consenso.
Cristián Aliaga, enólogo de Veramonte, afirma que en este momento, en el mundo es difícil vender Sauvignon Blanc sobre los 15 dólares. Como país hemos logrado montar una oferta en torno a los US$ 10 que permite vender en forma fácil. Para otros países es muy difícil competir con Chile en ese nivel y hay que sacarle partido a esa ventaja.
Paula Cárdenas, enóloga de Matetic, dice que se puede avanzar mucho en términos de estilo. Por ejemplo, ofrecer Sauvignon Blanc que no sean sólo interesantes en cuanto a aromas, sino también en boca. Además, se pueden ofrecer vinos que sirvan para guarda, y no sólo para consumirlos en el año.
Francisco Ponce, enólogo de Amayna de la viña Garcés Silva, asevera que hemos avanzado mucho, pero nos queda todavía un espacio muy grande por experimentar y explorar. Estoy seguro que en unos años más Chile va a lograr Sauvignon Blanc notables.
En El Mercurio de Chile, Eduardo Moraga Vásquez sacó una nota al respecto, donde cuenta la historia, el presente y las tendencias de la cepa en Chile.
Abre la nota con tres conceptos encadenados: hace una década los sauvignon blanc de Chile eran olvidables. Hoy amenazan a los líderes del mundo. Las próximas jugadas son expresar la diversidad geográfica del país y lograr vinos más complejos.
El Sauvignon Blanc está de moda en los pubs ingleses y gana terreno entre los consumidores, especialmente entre las mujeres.
La oferta mundial de SB de calidad, hasta hace poco tiempo, era de precios relativamente altos, como los provenientes de Nueva Zelanda. Hasta prohibitivos, como los de Sancerre, Francia.
Pero las viñas chilenas dieron un salto en calidad y comenzaron a pisar fuerte. Esto sumado a los precios muchísimo más baratos de los SB chilenos y la crisis que arrancó hace más de un año, cambió las reglas de juego del mercado mundial. Y Chile ya está muy presente con sus Sauvignon Blanc.
Jancis Robinson, la crítica de vinos más reputada del Reino Unido, dijo hace poco que Chile se ha consolidado como un proveedor de buena calidad en tintos. Sin embargo, una de sus características más distintivas es el amplio rango de buenos y crecientemente sutiles Sauvignon Blanc.
Y los números de 2009 lo corroboran: 16,2 millones de litros (contra los 14,4 millones del Cabernet Sauvignon, otrora caballito de batalla chileno).
El salto de calidad
Francisco Baettig, enólogo de Viña Errázuriz, dice que a comienzos de esta década, la calidad lograda por las viñas de Nueva Zelanda mostraba una brecha enorme, casi insalvable, con la realidad chilena.
Históricamente, en Chile el SB se confundió con la Sauvignon Vert o Sauvignonas (más herbácea y fenólica, de sensación menos compleja y aromática). Y esto se acentuaba por estar plantado en zonas cálidas de los valles centrales.
La renovación de variedades se produjo con el auge de los valles costeros en la última década. Las vitivinícolas chilenas comenzaron a migrar a esos lugares más fríos como forma de hacer vinos blancos más frescos. Como en Casablanca y Leyda, los dos valles costeros líderes, casi no existía tradición vitivínicola, fue natural para las bodegas romper con la inercia y plantar clones especialmente seleccionados de SB.
La ecuación de mejores clones y clima marino fresco comenzó a dar resultados sorprendentes en cuanto a calidad. Como un círculo virtuoso, eso hizo que las bodegas chilenas subieran su apuesta e implantaran más Sauvignon Blanc. De 6.790 Has. en el 2000 se pasó a 8.862 Has. en 2007.
Otro flanco fue el agronómico, cuidando los racimos del exceso de sol y el estar más pendiente de la fecha correcta de cosecha. Mariluz Marín, dueña de viña Casa Marín, dice que la ventana de tiempo es mucho más estrecha. En sólo dos días puedes pasar de tener una todavía verde a una madura y, en ese mismo tiempo, a tener sobremadurez.
Y el tercero la vinificación: los enólogos aprendieron a evitar la presencia de aire en el proceso de elaboración, preservando aromas frescos y evitando la oxidación, el gran enemigo del SB.
Reconocimiento y opiniones sobre el futuro
El Sauvignon Blanc chileno comenzó a ser noticia entre los consumidores y críticos de vino.
Por ejemplo, en la última premiación anual de la prestigiosa revista británica Decanter, distinguió como trophy (lo mejor del Varietal) al Castillo de Molina Sauvignon Blanc Elqui 2008 y al Undurraga TH Sauvignon Blanc Lo Abarca 2008.
Pero el salto en calidad no ha ido aparejado de un crecimiento significativo en los precios.
Mariluz Marín, de Casa Marín, dice que todavía nos falta posicionarnos en cuanto a imagen. Los neozelandeses lo hicieron muy bien: ejecutaron una campaña de imagen país y se posicionaron en segmentos de precios altos. En cambio, cada viña chilena trata de posicionarse en forma solitaria. Hay que tener en cuenta que en los supermercados o tiendas nos colocan dentro de las góndolas de Sudamérica, región que tiene fama por los vinos tintos. Ese posicionamiento hace que la gente no esté dispuesta a pagar mucho por un vino blanco.
Sin embargo, respecto de la posibilidad de subir los precios por botella no hay consenso.
Cristián Aliaga, enólogo de Veramonte, afirma que en este momento, en el mundo es difícil vender Sauvignon Blanc sobre los 15 dólares. Como país hemos logrado montar una oferta en torno a los US$ 10 que permite vender en forma fácil. Para otros países es muy difícil competir con Chile en ese nivel y hay que sacarle partido a esa ventaja.
Paula Cárdenas, enóloga de Matetic, dice que se puede avanzar mucho en términos de estilo. Por ejemplo, ofrecer Sauvignon Blanc que no sean sólo interesantes en cuanto a aromas, sino también en boca. Además, se pueden ofrecer vinos que sirvan para guarda, y no sólo para consumirlos en el año.
Francisco Ponce, enólogo de Amayna de la viña Garcés Silva, asevera que hemos avanzado mucho, pero nos queda todavía un espacio muy grande por experimentar y explorar. Estoy seguro que en unos años más Chile va a lograr Sauvignon Blanc notables.
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