En los últimos dos números de una revista de vinos reconocida y con más de un lustro en nuestro mercado (no voy a dar el nombre porque no me quiero meter con sus negocios), apareció publicidad que me llamó la atención y me generó malos pensamientos.
Desde ya, que la publicidad en un medio es un tema que siempre tiene que ser analizada desde el punto de vista ético. Si tengo un diario o una revista política y salgo con propaganda de un partido político que no es gobierno (porque está obligado a poner cierta cuota de publicidad) o con demasiada del gobierno de turno, habrá quienes piensen (con sano criterio) que lo están subvencionando para que los apoye o no los critique. Pueden ser casualidad, pero...
En una revista o medio de vinos especificamente, que haya publicidad de vinos o bodegas ya es un temita complicado, por la presunta objetividad del medio. Ejemplos: revista X habla bien de un vino y en la próxima edición aparece una publicidad de esa etiqueta o de la bodega. Revista Z habla bien del Malbec fulano y en esa misma edición hay publicidad de fulano... Puede ser una casualidad, pero...
Es muy difícil que un medio tenga pauta de alguien y diga que un producto suyo no es bueno. Por lo que va a resultar casi imposible que la revista X hablé que un vino no rinde bien y en próximos números aparezca una publicidad del dueño de la marca de vino.
El submundo de esto son las publinotas, que no necesariamente advierten que es un Espacio de Publicidad y hasta llegan a ser editoriales... Esta flora crece más en los medios más chicos, como lo son justamente: las revistas de vinos.
Las publinotas pueden ocupar muchas páginas anunciando novedades como que salió tal libro que seleccionó las mejoresetiquetas del mercado, tal nuevo Pinot de altura o que justo una escuela de sommeliers anuncia su carrera y unos nuevos cursos. Pueden ser de onda, pero... Como decían Los Twist: el primero te lo regalan, el segundo te lo venden!
Pero para el consumidor de la revista o medio, lo embromado es que muchísimas veces no se avisa que se cobra, que es publicidad: ni sale el aviso Espacio de Publ... y uno cree en eso como noticia. Y claro que es parte de la realidad, pero ha sido manipulada o parcializada. Hay billetes, mercancías o gentilezas obligadas por la acción: un intercambio.
Ya planteado el tema y dejando en claro que no todos hacen negocios (o no solamente), voy al punto que me generó este desarrollo ¿Cuál es el peor enemigo del vino? Sacando que algún gobierno nos lo quiera prohibir o situaciones inevitables, como que el clima cambie tanto como para que empiece a desaparecer, lo primero que se me ocurre es mirar hacia el objeto. Y entonces diría que es el que esté mal hecho, vino malo... Sí, un problema conocido y que tendría que ser difundido por todos los medios especializados en cada caso que encuentren o sepan.
Pero no, a ver...
Entonces se me ocurre el que sea caro, que haya mucho vino caro. Y justo es aclarar, que nomás uno prueba una etiqueta que rinde mal o peor, lo primero que suele decir es que vino malo... Y vino malo hay poco, lo que hay mucho es caro (caro no es de alto precio o sugerido, sino que vale menos de lo que cuesta... La parte negativa de la famosa Relación Precio Calidad).
Tampoco.
Sigo pensando y ya me tengo que volver a salir del objeto y pensar en algo externo... ¿Enemigo del vino?...
¿La competencia?...
Sí! Ese es el origen de mis malos pensamientos ¿Y cuál es el peor enemigo del vino en La Argentina?
¿La cerveza??
Sí... Lamentablemente
¿Por qué lamentablemente?
Y, porque es rica.
Rica y barata.
El problema con la cerveza, es que es más barata.
Sin entrar a discutir si es un producto industrial o no (porque es meterse en un berenjenal), más industrial o no (depende la escala, pero creo que lo es), si el 90% es agua (¿Y el vino no?) y así podría seguir, lo importante es que la cerveza es la mayor competencia del vino.
Recordemos que un Tetra o la botella de vino más barata sale $ 6 y una cerveza común está la mitad. Las mejores cervezas industriales están seguro debajo de esos 6 pesos. Alta competencia!
Un dato cortito más: está comprobado que la cerveza barrió con el consumo del Vino Blanco en nuestro territorio (el Vino Blanco se toma frío como la cerveza...).
Bueno ¿Y entonces? No des mas vueltas!
Buenooo... Decía que me sorprendió (mal) ver varias páginas (y hasta doble página) de publicidad en esta importante revista de vinos... Me generó malos pensamientos.
¿Pero publicidad de qué?
De cervezaaa!
Ahh... ¿Y quién sos vos para juzgar eso?
Nadie, un piscuí.
Solo soy un amante del vino y sé que el objetivo de la publicidad es motivar al público hacia el consumo del objeto publicitado.
Desde ya, que la publicidad en un medio es un tema que siempre tiene que ser analizada desde el punto de vista ético. Si tengo un diario o una revista política y salgo con propaganda de un partido político que no es gobierno (porque está obligado a poner cierta cuota de publicidad) o con demasiada del gobierno de turno, habrá quienes piensen (con sano criterio) que lo están subvencionando para que los apoye o no los critique. Pueden ser casualidad, pero...
En una revista o medio de vinos especificamente, que haya publicidad de vinos o bodegas ya es un temita complicado, por la presunta objetividad del medio. Ejemplos: revista X habla bien de un vino y en la próxima edición aparece una publicidad de esa etiqueta o de la bodega. Revista Z habla bien del Malbec fulano y en esa misma edición hay publicidad de fulano... Puede ser una casualidad, pero...
Es muy difícil que un medio tenga pauta de alguien y diga que un producto suyo no es bueno. Por lo que va a resultar casi imposible que la revista X hablé que un vino no rinde bien y en próximos números aparezca una publicidad del dueño de la marca de vino.
El submundo de esto son las publinotas, que no necesariamente advierten que es un Espacio de Publicidad y hasta llegan a ser editoriales... Esta flora crece más en los medios más chicos, como lo son justamente: las revistas de vinos.
Las publinotas pueden ocupar muchas páginas anunciando novedades como que salió tal libro que seleccionó las mejoresetiquetas del mercado, tal nuevo Pinot de altura o que justo una escuela de sommeliers anuncia su carrera y unos nuevos cursos. Pueden ser de onda, pero... Como decían Los Twist: el primero te lo regalan, el segundo te lo venden!
Pero para el consumidor de la revista o medio, lo embromado es que muchísimas veces no se avisa que se cobra, que es publicidad: ni sale el aviso Espacio de Publ... y uno cree en eso como noticia. Y claro que es parte de la realidad, pero ha sido manipulada o parcializada. Hay billetes, mercancías o gentilezas obligadas por la acción: un intercambio.
Ya planteado el tema y dejando en claro que no todos hacen negocios (o no solamente), voy al punto que me generó este desarrollo ¿Cuál es el peor enemigo del vino? Sacando que algún gobierno nos lo quiera prohibir o situaciones inevitables, como que el clima cambie tanto como para que empiece a desaparecer, lo primero que se me ocurre es mirar hacia el objeto. Y entonces diría que es el que esté mal hecho, vino malo... Sí, un problema conocido y que tendría que ser difundido por todos los medios especializados en cada caso que encuentren o sepan.
Pero no, a ver...
Entonces se me ocurre el que sea caro, que haya mucho vino caro. Y justo es aclarar, que nomás uno prueba una etiqueta que rinde mal o peor, lo primero que suele decir es que vino malo... Y vino malo hay poco, lo que hay mucho es caro (caro no es de alto precio o sugerido, sino que vale menos de lo que cuesta... La parte negativa de la famosa Relación Precio Calidad).
Tampoco.
Sigo pensando y ya me tengo que volver a salir del objeto y pensar en algo externo... ¿Enemigo del vino?...
¿La competencia?...
Sí! Ese es el origen de mis malos pensamientos ¿Y cuál es el peor enemigo del vino en La Argentina?
¿La cerveza??
Sí... Lamentablemente
¿Por qué lamentablemente?
Y, porque es rica.
Rica y barata.
El problema con la cerveza, es que es más barata.
Sin entrar a discutir si es un producto industrial o no (porque es meterse en un berenjenal), más industrial o no (depende la escala, pero creo que lo es), si el 90% es agua (¿Y el vino no?) y así podría seguir, lo importante es que la cerveza es la mayor competencia del vino.
Recordemos que un Tetra o la botella de vino más barata sale $ 6 y una cerveza común está la mitad. Las mejores cervezas industriales están seguro debajo de esos 6 pesos. Alta competencia!
Un dato cortito más: está comprobado que la cerveza barrió con el consumo del Vino Blanco en nuestro territorio (el Vino Blanco se toma frío como la cerveza...).
Bueno ¿Y entonces? No des mas vueltas!
Buenooo... Decía que me sorprendió (mal) ver varias páginas (y hasta doble página) de publicidad en esta importante revista de vinos... Me generó malos pensamientos.
¿Pero publicidad de qué?
De cervezaaa!
Ahh... ¿Y quién sos vos para juzgar eso?
Nadie, un piscuí.
Solo soy un amante del vino y sé que el objetivo de la publicidad es motivar al público hacia el consumo del objeto publicitado.
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