Agradecido, brindo por él
Y les dejo un lindo texto:
Manteles rojos, cortinas como párpados transparentes. Olor a madera vieja, café y bebidas añejas. La primera cita marcó nuestro destino. Desde entonces, somos una nave en las tormentas oceánicas de la vida y el mundo termina acomodándose lentamente a nuestro alrededor.
Adoro tus dedos como jazmines cuando acarician la copa. Celoso, quisiera ser ese cristal, mi boca su oquedad y ese vino tempranillo, el néctar de tu saliva. Aroma frutal en tu aliento, un tango como satén… y el beso con el que arrebatamos a la muerte la última palabra.
Se ha detenido el péndulo del viejo reloj. Se desdibuja la imagen de los parroquianos en la barra.
- ¡Mozo! Un vasito con miel para los ángeles-. Pequeños, azules, danzan sobre nuestras copas. Dejan aureolas de luz dorada y polvo de estrellas en tu pelo.
Acá más Arte de Fin de Semana.
Y les dejo un lindo texto:
Tempranillo
por Susana Micone
Manteles rojos, cortinas como párpados transparentes. Olor a madera vieja, café y bebidas añejas. La primera cita marcó nuestro destino. Desde entonces, somos una nave en las tormentas oceánicas de la vida y el mundo termina acomodándose lentamente a nuestro alrededor.
Adoro tus dedos como jazmines cuando acarician la copa. Celoso, quisiera ser ese cristal, mi boca su oquedad y ese vino tempranillo, el néctar de tu saliva. Aroma frutal en tu aliento, un tango como satén… y el beso con el que arrebatamos a la muerte la última palabra.
Se ha detenido el péndulo del viejo reloj. Se desdibuja la imagen de los parroquianos en la barra.
- ¡Mozo! Un vasito con miel para los ángeles-. Pequeños, azules, danzan sobre nuestras copas. Dejan aureolas de luz dorada y polvo de estrellas en tu pelo.
Acá más Arte de Fin de Semana.
Yo también alzo mi copa!
ResponderEliminarAl GRAN NESTOR, Argentino, Salud!
ResponderEliminarSe lo extraña... hace falta!
Salute!